Schumann: Consejos a los jóvenes estudiantes de música

La palabra “jugar” es muy hermosa, puesto que el “jugar” en un instrumento debe identificarse con el instrumento mismo. El que no juega con el instrumento, no lo juega.
(1830) 1

A menudo me he sentido apagado, acongojado y anonadado. Pero entonces me acerqué a ti, y mi alma dejó de llorar porque pudo hablar y dialogar.
(Noticias del Diario de los años 1828-1838)

¡Proyectar luz en lo profundo del corazón humano, he aquí la vocación del artista!
(1843)


Roberto Schumann, el más grande compositor alemán del periodo romántico, nace en Zwickau (Sajovia) el 8 de Junio de 1810. Se inició como virtuoso del piano dedicándose luego principalmente a la composición y a la crítica. En 1834 -con Knorr, Schuncke y Wieck (su maestro)- fundó, en Leipzig, la Nueva Gaceta Musical, de la actual fue el único redactor desde 1835 hasta 1844. En dicho periodo, Schumann luchó infatigablemente en pro del progreso musical, ora fustigando (por ejemplo: a Meyerbeer), ora elogiando (por ejemplo: a Cherubini y a Mendelssohn).
De Mendelssohn dijo: “Considero que Mendelssohn es el primer músico de esta época y en su presencia, como frente a un maestro, me quito el sombrero. Solo que juega, con todo, particularmente con las masas orquestales, pero cuán libremente juega, cuán finamente, cuán artísticamente, con qué entera maestría lo hace”.
La gloria de Schumann, como critico musical, es la de haber revelado al público el genio de Chopin (1833-1849), de Berlioz (1803) y de Brahms (1833-1837). Su último artículo escrito en la gaceta fue precisamente sobre Brahms (1853).
Entre sus composiciones se destacan: Carnaval, Fantasía, Krisleriana, Seis sonetas para piano, Lieder, sinfonías, conciertos para piano y violoncello, etc..
Fallece privado de sus facultades mentales el 29 de Junio de 1856.



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Esta vez abarcaremos no tanto la vida de tan excelente compositor si no sus consejos acerca de la música, no sólo de este artículo que ha escrito, si no además de otros escritos que pude rescatar.

Acerca del ensayo de un tratado de estética musical, compuesto alrededor de 1828 y titulado “El mundo de los sonidos”, del diario de Santa Cecilia, podemos obtener, de forma fragmentada, esta hermosa escritura sobre la música:

La música es el gran lazo invisible que une a todos los espíritus, puesto que entre todos los espíritus impera un armonioso acorde, del mismo modo como en la música la armonía es la unión comunicativa de los sonidos. La música es la capacidad de sentirnos vivir en voz alta, es el lenguaje espiritual el sentimiento, aún más escondido que la afectividad más profunda, pero entretejido con ella y entrañando en lo más íntimo. Los sentidos deben experimentar primero el dolor y la alegría, como en el piano primero se tocan las teclas antes de que suenen, y sólo entonces el sentimiento se entrega a la dominación de los sonidos todavía adormecidos. Así, la música es la misteriosa espiritualización de nuestras emociones. Únicamente cuando hemos experimentado un dolor o una alegría en toda su posibilidad, sólo entonces se agitan las profundidades, el fantasmagórico imperio de los sonidos se anima vivazmente, mientras que en los sentidos se aquietan y se clarifican. La música tranquiliza siempre cuando brota de nosotros mismos, al paso que la alegría nos agita, como las lágrimas alivian nuestro dolor y lo provocan en los demás. El que posee el sonido musical no necesita lágrimas, ambos –sonido y lágrimas- valen lo mismo, son las disueltas concepciones del afecto. Los corpúsculos del polvo sólo se hacen visibles y se corporizan en los rayos solares. Los sonidos despiertan a través del ardor del entusiasmo: los sonidos son el eco del sentimiento; al anochecer, en cuanto se hace el silencio, se los oye más distintamente.

Es la diosa viva de la esencia de lo espiritual.



A continuación su famoso: Consejos a los jóvenes estudiantes de música

1.- La educación del oído es de máxima importancia; es conveniente, pues,
que enseguida te ocupes de ella, esforzándote en reconocer cualquier sonido
que oigas y la tonalidad de cada trozo de música. Procura también saber que
sonidos producen las campanas, el cuchillo, etc..

2.- Tocar con atención las escalas y los ejercicios mecánicos es cosa
óptima; pero no imites a esos pianistas que, creyendo que con esto se
alcanza el máximo resultado, dedican siempre hasta la más avanzada edad,
varias horas diarias a los ejercicios mecánicos de los dedos. Eso equivale a
repetir diariamente, con creciente rapidez, las letras del abecedario. Es
necesario emplear mejor el tiempo.

3.- Se han construido los llamados teclados mudos; pero después de breve uso
te convencerás de su inutilidad: ¿como pueden los mudos enseñar a hablar?.

4.- ¡Lleva bien el compás! La ejecución de algunos concertistas se parece al
andar de un borracho: guárdate de tomar a ellos por modelo.

5.- Profundízate temprano en las leyes fundamentales de la armonía.

6.- No te asustes de los nombres: Teoría, armonía, contrapunto, etc...; con
un poco de buena voluntad, pronto te serán familiares.

7.- ¡No toques negligentemente! Ejecuta cada trozo siempre con mucha
atención, sin omitir nada.

8.- Tocar muy deprisa es un defecto tan grande, como tocar muy despacio.

9.- Procura ejecutar lo mejor posibles trozos fáciles; obtendrás así más
beneficio que ejecutando mediocremente composiciones difíciles.

10.- Ten siempre tu instrumento perfectamente afinado.

11.- No basta saber ejecutar con los dedos la música; hay que saber también
cantarla, en voz baja, sin recurrir al instrumento.

12.- Ejercita tu memoria para poder retener no solo la melodía de una
composición, sino también su armonía.

13.- Aunque tengas poca voz, acostúmbrate a cantar repentizando, sin la
ayuda de instrumento alguno; así perfeccionarás siempre más el oído. Pero si
tienes la suerte de poseer una hermosa voz, no vaciles en educarla;
¡considérala como uno de los más preciados dones que te haya concedido
Dios!.

14.- Procura llegar a comprender la música escrita, sin ejecutarla: con solo
leerla

15.- Cuando toques, no te preocupes de quienes te escuchan; pero si, ejecuta
siempre como si te escuchara un maestro.

16.- La primera cualidad de la interpretación es la precisión, o sea la
exacta observancia del texto, que pone de relieve la más recóndita intención
del autor.

17.- Si te dan para tocar un trozo que no conoces, léelo antes de
ejecutarlo.

18.- Si después de la técnica diaria estás cansado, no continúes tocando: es
mejor descansar que trabajar sin placer y sin energía.

19.- No ejecutes las composiciones que están de moda. El tiempo es precioso,
y seria necesario vivir cien veces más de lo que se vive para llegar a
conocer solo la buena música existente.

20.- Nutriendo a los niños con golosinas no se forman hombres sanos. La
nutrición del espíritu, como la del cuerpo, debe ser sencilla y
substanciosa. Los grandes maestros te han provisto abundantemente:
aliméntate de sus obras.

21.- Aquella música cuyo único fin es poner en evidencia dificultades
técnicas en la ejecución, pronto pasa de moda: las dificultades técnicas
tienen valor solo cuando persiguen fines más elevados, o sea cuando logran
una perfecta ejecución de la música de verdadero mérito.

22.- No divulgues las malas composiciones, antes trata con todas tus fuerzas
de impedir su difusión.

23.- No toques música mala y, salvo que las circunstancias te obliguen,
tampoco la escuches.

24.- No creas que la verdadera maestría consiste solo en la agilidad. En la
ejecución de un trozo procura más bien producir la impresión que tenia en la
mente el compositor, y nada más. Cualquier otra cosa sería caricatura.

25.- No olvides que es cosa detestable y monstruosa hacer cambio y
mutilaciones en la música de los grandes compositores, como también agregar
adornos de uso exclusivamente moderno. Es la máxima injuria que se pueda
hacer al arte.
Nota del traductor: Aquí recuerda lo que dice Berlioz al respecto: "No, no,
no, diez millones de veces no; músicos, poetas, actores, pianistas,
directores de orquesta de tercero, segundo y también de primer orden,
vosotros no tenéis el derecho de retocar a los Beethoven y a los
Shakespeare, para hacerles la limosna de vuestra ciencia y de vuestro gusto.
No, no, no, mil millones de veces no; un hombre, cualquiera no tiene el
derecho de constreñir a otro hombre, cualquiera que sea, a dejar su propia
fisonomía para tomar otra, a expresarse en una manera que no es la suya, a
asumir una forma que él no ha elegido".

26.- Al seleccionar la música que debes estudiar, consulta siempre a
personas con más experiencia que tú: ahorrarás tiempo.

27.- Procura conocer paulatinamente las obras maestras de los mejores
compositores.

28.- No te dejes engañar por los aplausos que obtienen muy a menudo los
llamados virtuosos. La aprobación de los competentes sea para ti de mayor
valor que la del público.

29.- La música que está de moda tiene poca vida; si persistes en cultivarla,
serás considerado un necio.

30.- Tocar mucho en reuniones sociales es más dañoso que útil. Adáptate al
gusto y a la inteligencia del auditorio; pero sin ejecutar ninguna música de
la cuál, íntimamente, puedas avergonzarte.

31.- Aprovecha la ocasión de tocar música de conjunto, o sea: duetos, tríos,
cuartetos, etc... adquirirás siempre desenvoltura y arrojo en la ejecución.
También es beneficioso acompañar a los cantantes.

32.- Si todos quieren ser primer violín, ¿como sería posible formar una
orquesta?. Por lo tanto valora a cada ejecutante en la parte que desempeña.

33.- Ama el instrumento que tocas; pero no seas tan vanidoso de creer que él
es el mejor de todos, pues otros no le son inferiores. Reflexiona también
que existe la voz humana, y que en la música se alcanza lo sublime uniendo
el coro a la orquesta.

34.- Progresando en el arte, trata de familiarizarte más con las partituras
que con los virtuosos.

35.- Ejecuta muy a menudo las gufas de los grandes maestros, máxime las de
Juan Sebastián Bach. El Clave bien temperado sea tu pan cotidiano; llegarás,
sin duda a ser un pianista de prestigio.
Nota del traductor: Creo oportuno transcribir lo que dice Benjamín Cesi en
su célebre "Método para el estudio del piano": Base sólida para el
estudiante de piano será siempre el culto y el estudio constante de los
clásicos: Bach, Clementi y Beethoven; sin estos no se puede llegar a ser
artista".

36.- Entre tus compañeros, debes preferir siempre a los que saben más que
tú.

37.- Mitiga la severidad de tus estudios musicales con la lectura de buenos
poetas. Además, pasea muy a menudo por los campos y los bosques.

38.- Se puede aprender mucho de los cantantes; pero no es prudente creer
todo lo que dicen.

39.- Reflexiona que no eres único en el mundo; por lo tanto sé modesto. Tú
no has ideado o hallado cosa que otros no hayan ideado o hallado antes que
tú; y en el caso que esto aconteciera, considéralo como un don de Dios que
debes dividir con otros.

40.- El estudio de la historia de la música y la audición de la obra de los
grandes maestros de distintas épocas, son los verdaderos remedios contra
toda vanidad y presunción.
Nota del traductor: Hasta la fecha se han traducido al español cuatro
historias de la música escritas por auténticos musicógrafos: La de Hugo
Riemann, la de Juan Wolf, la de Alfredo Einstein y la de Andrés Della Corte
y Guido Pannain.

41.- Un hermoso libro es el de Thibaut, titulado "Pureza del arte musical".
Leelo muy a menudo cuando llegues a la edad madura.
Nota del traductor: Antonio Federico Justo Thibaut, nació en Hameln el 4 de
Enero de 1774, y falleció el 28 de marzo de 1840 en Heidelberg, donde era
profesor de derecho. En 1825 publicó el libro "Arte y pureza musical" (cuya
versión al español no existe), que en Alemania ejerció mucha influencia
sobre el renacimiento de la música antigua, máxime de la iglesia.
Thibaut llegó a reunir más de 600 importantes composiciones de distintos
autores de todos los paises (siglos XV, XVI, XVII y XVIII), las cuales,
después de su muerte, fueron adquiridas por el rey de Baviera para la
biblioteca real de Munich.

42.- Si pasando delante de la iglesia, oyes tocar el órgano, detente y
escucha. Si alguna vez puedes tocar dicho instrumento, te asombrarás de la
gran potencia de la música producida por tus pequeños dedos.

43.- Aprovecha cuantas ocasiones se te presenten de ejercitarte en el
órgano; ningún instrumento como éste hace oír claramente las deficiencias de
la ejecución y el pésimo estilo de la composición.

44.- Canta muy a menudo en los coros, máxime en las partes medias; esto
contribuirá a formar tu sensibilidad musical.

45.- ¿Que quiere decir sensibilidad musical?. Tu no la posees si tocas un
trozo con fatiga, mirando con ansiedad los sonidos escritos; o si,
ejecutando, te detienes de repente y eres incapaz de continuar, porque te
han dado vuelta dos páginas al mismo tiempo. Por el contrario tú la posees
si, tocando un trozo nuevo para ti, llegas a adivinar, en cierto modo, lo
que sigue; o si el trozo te es conocido, lo recuerdas. En conclusión, tú
posees sensibilidad musical si tienes la música no solo en los dedos, sino
también en la cabeza y en el corazón.

46.- ¿Como se puede adquirir la sensibilidad musical?. Mis queridos amigos,
la sensibilidad musical es un don divino, y consiste, principalmente, en
tener un oído delicado y una rápida facultad de percepción. Estas dichosas
disposiciones pueden ser cultivadas y perfeccionadas, pero no encerrándose
en un cuarto y tocando los solo ejercicios mecánicos, sino estando en
contacto con otros músicos y, especialmente, familiarizándote con el coro y
la orquesta.

47.- Procura conocer bien y a tiempo la extensión de la voz humana en sus
cuatro modificaciones. Estúdiala particularmente en los coros, investigando
cuales son los sonidos con que la voz manifiesta mayor potencia y cuales
aquellos con que expresa pasiones tiernas y sentimientos delicados.

48.- Escucha con atención los cantos populares; ellos constituyen un rico
manantial de hermosísimas melodías que te facilitarán el estudio sobre el
carácter de la música de las diferentes naciones.

49.- Ejercítate muy a menudo en la lectura de las claves antiguas; de lo
contrario, ignorarás muchos tesoros del pasado.
Nota del traductor: Por lo tanto no escuchéis a los que afirman que las
claves de Do son antiguallas inútiles, y que deben desecharse de todas las
escuelas modernas.

50.- Pon atención al diferente timbre y al carácter propio de los distintos
instrumentos, procurando retener en tu oído las cualidades particulares de
sus sonidos.

51.- Respeta la música antigua; pero interésate también por la moderna.

52.- No tengas ánimo adverso por la música cuyo autor te es desconocido.

53.- No juzgues una composición después de la primera audición, pues lo que
agrada en seguida no siempre es lo mejor. Las obras de los grandes maestros
deben ser estudiadas, y muchas cosas serán claras para ti, cuando tengas más
años.

54.- Al emitir un juicio sobre las composiciones, debes distinguir aquellas
que pertenecen al verdadero arte de las que sirven para deleitar a los
aficionados. Aprecia las primeras; pero no desprecies las otras.

55.- ¡Melodía!, he aquí el grito de guerra de los aficionados. Y a decir
verdad, no existiría música sin melodía. Pero es necesario conocer bien que
cosa entienden ellos por melodía: un estribillo de fácil comprensión y de
agradable ritmo. Pero existen melodías de género diferente: si se da un
vistazo a las obras de Bach, Mozart, Beethoven, se verá como ellas se
presentan bajo mil formas distintas. Es de esperar que pronto te fastidien
las melodías uniformes, especialmente aquellas de las nuevas óperas
italianas.
Nota del traductor: Ignoro cuáles son esas "nuevas óperas italianas": ¿las
de Petrella, Pacini, Lauro Rossi, los hermanos Ricci, Mercadante, Nini,
Persiani?. Tal vez; pero de seguro no pueden ser las de Rossini, Donizetti,
Bellini y Verdi, que contienen hermosas e inmortales melodías que todo
verdadero artista admira. Y en efecto, el mismo Schumann así se expresa en
una carta dirigida a su maestro Wieck: "Usted no tiene ninguna idea de la
música italiana; esta se debe escuchar bajo el cielo que la ha creado: el de
Italia. En las salas de concierto de Leipzig yo he experimentado
frecuentemente estremecimientos de éxtasis y me he espantado del genio de la
música; pero en Italia he aprendido a amar ese genio. Existe en mi vida una
noche -única- en la cual me pareció que Dios se me presentó delante,
dejándome libre y dulcemente contemplar su rostro; esto fue en Milán, cuando
oí a Judit Pasta cantando música de Rossini. No se sonría maestro: es la
verdad".

56.- Es bueno componer pequeñas melodías en el piano; pero si las ideas
musicales vienen a ti, sin buscarlas en el piano, tendrás que alegrarte
mucho más, porque tu sensibilidad musical se despierta. Los dedos deben
ejecutar lo que el cerebro quiere, y no lo contrario.

57.- Cuando empieces a componer, imagina primero con el pensamiento, y sólo
cuando tu trabajo está completamente ideado en tu cerebro, ejecútalo en el
piano.

58.- Si tu música proviene del alma y del corazón, y tú mismo te conmueves.
Entonces ella podrá conmover también a los demás.

59.- Si Dios te ha dado el don de una fantasía vivaz, cuando te halles solo,
sentado ante el piano, muy a menudo tentarás de expresar con las armonías el
íntimo sentimiento de tu ánimo; y cuanto más obscura sea para ti la ciencia
armónica, tanto más te parecerá ser misteriosamente arrastrado a regiones
encantadas. Estas son las horas más bellas de la juventud. Pero no te dejes
llevar frecuentemente por la fantasía que podría hacerte perder tiempo y
fuerzas, corriendo detrás de fantasmas. Nunca se llega a dominar las formas
de la composición y a expresar claramente las propias ideas, si no se ponen
por escrito los propios conceptos. Por lo tanto, escribe más de lo que
improvises.

60.- Trata de adquirir a tiempo el arte de dirigir la orquesta. Observa a
los buenos directores y esfuérzate en dirigir tú mismo mentalmente: así
adquirirás lucidez de percepción.

61.- Estudia atentamente la vida y procúrate conocimientos también en otras
artes y ciencias.

62.- Las leyes de la moral son también las del arte.

63.- Diligencia y perseverancia son los factores más importantes del
progreso.
Nota del traductor: Respecto a la diligencia, creo oportuno recordar lo que
dice Leonardo de Vinci: "No olvides que aprenderás más con la diligencia que
con la prisa", y en cuanto a la perseverancia recuerda el célebre refrán:
"La gotera cava la piedra", o sea, que la constancia vence toda dificultad.

64.- De una libra de hierro, que cuesta pocos centavos, se puede obtener un
millar de manecillas de reloj, cuyo valor, comparado con el de la primera
materia, es prodigioso.
Emplea, por lo tanto, concienzudamente la "Libra" que has recibido de Dios.

65.- En arte, sin entusiasmo, nada grande se produce.

66.- El objeto del arte no debe ser la ganancia material. Trata de llegar a
ser lo más experto posible: el resto vendrá solo.

67.- El espíritu de una composición te será claro recién cuando hayas
comprendido bien su forma.

68.- Tal vez un solo un genio puede llegar a comprender a otro genio.

69.- Se dice que un perfecto músico, al escuchar por primera vez un trozo
orquestal, por complicado que sea, debería verlo en su mente como si tuviera
delante la partitura escrita. Esto sería, verdaderamente, el colmo del
intelecto musical.

70.- El Estudio no tiene fin.
Nota del traductor: Recuerda lo que dice Arturo Graf en su interesante libro
de aforismos y parábolas Ecce Homo (edic. treves, Milán, 1908): "Cuando yo
era joven, me parecía saber mucho; ahora, después de años y años de estudio,
me doy cuenta de que sé muy poco; sin embargo, no es posible que el estudio
sea un progreso en la ignorancia.




Esperamos que aquellos aficionados a la música clásica, como al estudio cuidadoso de ella hayan podido obtener una valiosa información por parte de Schumann. Aquí los dejo con algunos consejos más sacados de distintos escritos que encontré en los “Principios para la vida musical y hogareña”. Gracias por leernos.


• No creas que la vieja música ha envejecido. Como una palabra hermosa y verídica no puede envejecer, tampoco puede envejecer la música hermosa y verídica.

• No debes amar a un solo maestro. Muchos son los que han existido.

• Si empiezas a componer, de primera intención hazlo todo mentalmente. Sólo cuando la pieza este terminada, pruébala en el instrumento. Si tu música ha brotado de tu intimidad, como tú la has sentido así ella obrará luego sobre los demás.

• Cuando realmente progresas, antes te será grato frecuentar las partituras, no los virtuosos.

• Si te piden que toques frente a alguien no te hagas rogar; hazlo inmediatamente, o si no desiste del todo.

• Si tocas, no te preocupes por quien te escucha.

• Toca siempre como si un maestro te escuchara.









1 Para la buena comprensión de este dicho de Schumann conviene recordar que en alemán el verbo spielen (lo mismo que en francés jouer o en inglés to play) significa “jugar”, pero también “tocar un instrumento”.

Comentarios

Anónimo dijo…
muy bien el articulo y muy interesante lo que decia este tipo hace tantos años y que es tan actual..

me gusto la primera frase, pero en castellano no tiene gracia, ya que el verbo play (jugar) se utiliza para los instrumentos tambien, esa es la gracia de la frase, saludos felicitaciones


Mr X
Anónimo dijo…
Muy bueno, La traduccion esta realizada por victor de rubertis, Pedadgogo y musico argentino, editor y traductor de varios libros. Recuerda que la primera frase esta en aleman en su idioma original, y el verbo spielen refiere mas al juego con el instrumento, e interpretieren con la ejecucion misma. No guiarse de los textos en ingles, ya que no son los originales. Espero que el texto que tengo en aleman sea el original.

Saludos, Dante Dell. Argentina

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