Las Mujeres al Piano, parte I

Esta vez, la cuestión es más personal.

Ya sin tantos preámbulos ni "investigaciones" les quiero dejar, entre otras cosillas, parte de una entrevista que rescaté de la revista "Rec or Play Música" a esta pianista-blusera: Cristina Dall, una de las 4 patas que sostuvieron los 4 discos y más de 10 años de trayectoria de Las Blacanblus.


¿Cuándo comenzaste a tocar?
Desde muy chica. El piano fue el 1er. instrumento que toqué. Mi padre escuchaba mucha música clásica, y clásica también fue mi formación (...).

¿A quiénes reconocés como influencias?
The Beatles y Rolling Stones son los 2 pilares de esa época, pero mis gustos pasaban por el rock negro, el blues, el rock americano de Chuck Berry, como principal referente. Me gusta el honky-tonk, la música de burdel que tiene ese sonido de piano vertical, música de cantina.

¿Te considerás más pianista que cantante?
Reconozco 3 aspectos en mi persona: pianista, cantante y compositora. Sin descollar en ninguna, soy un poco de cada una de esas cosas.

¿Cuándo comenzaste a tocar más profesionalmente?
Era una época -principios de los '80- difícil para hacerse un lugar entre hombres, y mucho más difícil poder grabar. Una banda que yo iba a ver, llamada Magnum 44, me convocó para cantar luego de haber hecho una audición con unos nervios terribles.

¿Cómo se formó Blacanblus?
Yo había comenzado a tomar clases de canto con una profesora de canto "negro", o sea, más arraigada con las raíces del blues, el soul y el gospel. Ahí nos conocimos con las chicas. Al comienzo frecuentábamos boliches donde yo había tocado con otros músicos. Eramos bichos raros. Igualmente hemos contado con la ayuda de muchos artistas, Pappo nos dió una mano muy grande. Y otros músicos como Los Redondos, Botafogo y Fito también nos dieron su apoyo.

¿Cómo era el trabajo vocal que realizaban, tanto en vivo como en estudio?
Llevándolo a un coro, nuestro registro era de mezzos y sopranos, pero, de ser necesario, algunas podíamos conseguir un registro más bajo o más alto, dependía del momento. En vivo cada una tomaba su momento como en una suerte de "solo" y sabía como adecuarse a su registro. También había algo de improvisación, pero estaba previamente pensado el lugar de cada una (...). En estudio sí aparecían Viviana Scaliza y Déborah Dixon, porque poseen un registro más amplio, pero nos manejábamos igual, por momentos la voz como solista, y en otros compartiendo la 1ª voz.

A modo de cierre, ¿qué pianos tuviste y qué tenés actualmente?
Mi 1er. instrumento fue un piano vertical. Hoy tengo un Roland RD-600, el mejor teclado que tuve. Aún mantengo un Korg X-3, y alguna vez tuve un Ensoniq.